RICARDO DUARTE – AGRAPP
Las Memorias conversadas® son historias de vida escritas en primera persona por Isa López Giraldo
Agrapp, la primera plataforma de financiamiento web para el sector agro, es una aplicación que tiende puentes entre agricultores e inversores.
David Ricardo Duarte – socio.
Provengo de una familia humilde. Mi papá es un desplazado de la violencia que, de la mano de mi abuela, llegó a la ciudad donde se conoció con mi mamá. Con el tiempo inició su fábrica de muebles, lo que me acercó a reconocer la figura de quien tiene la fortaleza para salir adelante por su cuenta, sin depender de un empleo. En contraste con mi mamá que trabajó desde siempre en el Hospital Militar Central, aún en la actualidad.
Inicialmente estudié en un colegio público en Kennedy, luego en el de la Fuerza Aérea, donde conocí a mi socio. El propósito de mi mamá era que saliera con libreta militar, pero a mí me encantó la milicia y, una vez me gradué, ingresé a la escuela militar de aviación, que es donde ser forman los oficiales. Hoy tengo el honor de tener horas de vuelo como piloto militar e hice la transición como piloto comercial, esto en contraste con la expectativa de mi mamá.
Pero también he trabajado en ventas, en estructuración de proyectos y mi pregrado fue en ingeniería mecánica en Cali, al tiempo que me gradué como subteniente. Ocupé los primeros lugares, lo que me dio la oportunidad de iniciar mi curso de vuelo y fui seleccionado para volar jet, una experiencia que me dejó los mejores recuerdos.
Posteriormente, y con toda la transición que hubo en las Fuerzas Militares por el proceso de Paz, me dejó en una situación en la que no vi crecimiento profesional, pero tampoco personal, al que siempre he aspirado. Con extrema gratitud, tomé la decisión de retirarme, en pro de pasar a la aviación comercial.
Quise tener empresa propia y con mi socio, Carlos Iván Zubieta, habíamos intentado un emprendimiento en aeronáutica que lamentablemente no se dio, pues él tuvo muy buenas opciones de irse del país. Años más tarde coincidimos nuevamente, revisamos alternativas y comenzamos a tejer la historia de Agrapp.
Carlos tenía un blog de agro, mi papá había tenido una actividad agrícola en el pasado junto con mi abuela, y fue ahí cuando identificamos una oportunidad. Nuestro reto fue acercar la tecnología, que yo conocía, para llevarle soluciones reales a los agricultores.
Iniciamos con algo de sensórica, luego debíamos unir puntas profesionales que les brindara real apoyo, así identificamos que la brecha está en el financiamiento, por lo que comenzamos a buscar soluciones, enfocándonos en los pequeños y medianos agricultores. Ahí comenzó a tomar forma lo que hoy es una plataforma de financiamiento que los conecta con inversores, sin importar el monto. Apoyamos la estructuración técnica y financiera, brindamos asistencia profesional durante su proceso y aseguramos la comercialización de sus productos vía contratos, con unos precios y condiciones justas para ambas partes.
- ¿Quiénes han sido tus mayores referentes?
Claramente, mis papás han tenido un rol protagónico, son mis referentes más altos. En mi camino fueron apareciendo otros que han ayudado en mi construcción, superiores como subalternos de las fuerzas militares, especialmente en temas de liderazgo.
- ¿Cuáles han sido tus más grandes retos?
El curso de vuelo dentro de la Fuerza Aérea fue muy exigente, me enseñó mucho en muy poco tiempo. En él hay que dar lo mejor y soportar la presión que ejerce. Pero, el mayor de todos, ha sido iniciar en el mundo del emprendimiento y más el de las Startups, fundar una empresa que tenga una vocación de impacto, es un gran reto.
- Basado en tu temprana experiencia, ¿qué recomendación le harías a quien quiera iniciar su camino hacia el emprendimiento?
Cuando se emprende con cierto nivel de éxito, convergen muchas fuerzas para sacarlo adelante. Con carácter y empeño, se logra canalizar las energías y materializarlas en resultados. También se debe validar la idea inicial, confrontarla con la realidad, y capacitarse con suficiencia. Pero hay que arriesgarse, formar criterio e identificar qué lo hace feliz y les sirve a los otros.
También recomiendo tomar acción ante la adversidad y no paralizarse. El ejemplo perfecto está en cuando se monta en bicicleta: entre más se pedalee, más estabilidad se tiene. Porque en la marcha se encuentran las soluciones, pero exige ciertas habilidades y demanda criterio para saber cuál de ellas es la más acertada.
También es importante la retroalimentación permanente, evaluar la evolución de los resultados a las decisiones que se han ido tomando.
- ¿Cómo quieres impactar al mundo?
De manera positiva. Quiero junto con mi socio, llevar soluciones y brindar oportunidades a millones de personas que dependen del agro, también formar personas para que comiencen a generar sus propias soluciones que alcancen a otros, como un factor multiplicador. Para mí es claro que, en el logro de mi propósito de servir, debo estar bien, la empresa debe tener un modelo de negocios sano y que genere ingresos. Después sí, se extiende la oportunidad y se transmite ese bienestar a otros.
- ¿Cuáles son tus mayores talentos?
Perseverancia, Autogestión y proactividad.
- ¿Cuál es tu código de ética?
Mi código de ética es muy alto. He llevado un ritmo de vida muy exigente, y ha estado marcado por los valores militares, en disciplina, cumplimiento y puntualidad. Porque recibí una formación muy estricta y cuadriculada, de mucho sacrificio.
No tolero faltas a la ética, y busco siempre rodearme de personas con las que pueda establecer relaciones de confianza.
Isabel López Giraldo es responsable del contenido de este sitio web. Davivienda actúa como patrocinador de la sección “Jóvenes Talentos”
