JUAN SIMÓN SALAZAR
Las Memorias conversadas® son historias de vida escritas en primera persona por Isa López Giraldo
hackU, más que una empresa, es un vehículo para cumplir un propósito de vida. Fue pensada para reinventar el sistema de educación que, a través de recursos educativos abiertos, llega a la base de la pirámide de forma personalizada y a través de la plataforma de WhatsApp.
Juan Simón Salazar – cofundador.
Mi origen está en Medellín – Antioquia, tengo 24 años. Actualmente vivo con mi mamá, Adriana Arboleda Gómez, quien es una emprendedora ejemplar, y con mi papá, Juan Ignacio Salazar. Tengo un hermano, Juan Jacobo, que actualmente estudia en Canadá, somos muy unidos y nos queremos un montón.
Mi familia es el centro de todo para mí. La familia lo ayuda a uno a volver a lo fundamental, a recordar lo importante, a que no se suba el ego, a ser agradecido. Un consejo de mi mamá, un consejo de mi papá, siempre son muy importantes.
He sido muy amiguero e inquieto, tengo humor negro y, en ocasiones, resulto terco. Durante el colegio vendí dulces, como primer viso de emprendimiento. El deporte me ayudó a adquirir disciplina, y practiqué natación en la Liga Antioqueña de Natación, donde fui muy competitivo.
Una vez terminé mi colegio me fui a vivir a Australia, dejando un estilo de vida cómodo, a mis amigos y a mi familia. El estar allá me ayudó a sortear situaciones y tomar decisiones difíciles y, a mis diecisiete años, tuve que buscar trabajo, buscar recursos y afrontar lo desconocido.
Ya graduado de la Escuela de Ingeniería de Antioquia, entré a hacer prácticas en un banco comercial, donde participé y lideré una estrategia comercial muy novedosa en el sector financiero, y en la que el banco fue pionero. Se trataba de prestarle plata a emprendedores sin historia y con mucho futuro, además, de invertir en sus proyectos. El desempeño individual fue tan positivo que hizo que me enamorara, aún más, del emprendimiento, me convenciera de que esto era lo que yo quería para mi vida, y me diera cuenta de que podía lograr grandes cosas.
- ¿Quiénes han sido tus mayores referentes?
Mi mamá, que trabajó en Telecom mucho tiempo, pero se retiró cuando se privatizó y ante el desempleo decidió emprender, mostrando su talante. Ahora tiene ya una microempresa.
En segunda instancia mis socios, Alejo, mi amigo desde la universidad, y mi primo Santi, porque hemos recorrido un camino juntos.
Pero también he tenido mentores a nivel profesional y personal. Uno de ellos fue mi primer jefe, quien me enseñó grandes principios que, aún hoy, me ayudan mucho en la toma de decisiones y en cómo establecer buenas relaciones.
- ¿Cuáles han sido tus mayores retos?
Uno de ellos lo tuve precisamente en el banco, cuando diseñé un proceso de crédito que no se basara en cifras financieras y, como entenderás, eso para un banco es muy difícil: prestarle recursos, por ejemplo, a una empresa en causal de disolución y no perder la plata. Esto fue un salto a lo desconocido, porque fuimos el banco que, en su momento, centró su atención en los emprendedores, no había referentes en América Latina.
- Basado en tu temprana experiencia, ¿qué recomendación le harías a quien quiera iniciar su camino hacia el emprendimiento?
Un poco de terquedad, pero no de orgullo. Uno debe tenerse confianza y perseguir su propósito. No rendirse, ser muy cauto en la toma de decisiones y documentarse muy bien, entiéndase que no se trata de tener todas las variables, pero sí el mayor número de ellas.
Existen dos tipos de personas en la vida. La que no sabe y no sabe que no sabe, entonces toma decisiones “a la loca” cometiendo equivocaciones. Y la persona que no sabe y sabe que no sabe, que es la que busca información, pregunta, escucha consejo, e intenta tomar una decisión acertada con esos elementos.
Entonces, siempre le recomendaría que no de nada por sentado, no suponga que tiene la verdad absoluta, que escuche, que haga la tarea, investigue, e intente tomar las mejores decisiones de acuerdo con una base racional. Que sus decisiones sean lo menos visceral posible.
- ¿Cómo quieres impactar al mundo?
Mi propósito personal es hacer cosas que mejoren la calidad de vida de la gente. La Universidad me dejó ver que este es un país donde los privilegios son para muy pocos, entonces, mi realización está en lograr que las oportunidades sean equitativas.
Quiero impactar desde hackU, llevando educación de muy excelente calidad, precisamente a esas personas que no alcanzan los privilegios de que hablo, que el alcance supere las fronteras, llegue a toda Latinoamérica y al mundo, pues existe una bolsa de más de sesenta millones de personas a quienes les podemos llegar.
También quisiera dejar un legado, tener una familia. Soy una persona con principios cristianos que me han ayudado a no perder el rumbo, entonces quiero, desde ese núcleo, aportar algo positivo.
- ¿Cuáles son tus mayores talentos?
Mi capacidad de analizar los opuestos, de sortear situaciones difíciles y tomar decisiones acertadas. Pero, soy muy cuidadoso a la hora de tomarlas, y lo hago de manera racional. Analizo el detalle, aterrizo la estrategia de largo plazo. Tengo mucha determinación.
- ¿Cuál es tu código de ética?
La honestidad, la gratitud, la lealtad. Para mí no existen mentiras blancas, en la medida de lo posible. El no olvidarme de los principios, de mi origen, algo que mi mamá siempre me recuerda: “Cuando estés muy adelante, “devolvéte” a como empezaste y ahí vas a darte cuenta, realmente, de lo importante de la vida”.
Isabel López Giraldo es responsable del contenido de este sitio web. Davivienda actúa como patrocinador de la sección “Jóvenes Talentos”.
